Ni por mil puñados de oro – Antonio Aguilar

se me destroza el corazon en mil pedasos
me siento solo como la pluma en el aire.

de que me sirve ya la vida en este mundo
si ya no tengo las caricias de mi madre.

cuando yo andaba disfrutando de placeres
jamas pensaba que una madre es lo primero
hoy que diosito me quito a mi pobre madre
se que una madre no se compra con dinero.

yo no cambiaba ni por mil puñados de oro
las bendiciones y el cariño de mi madre
de sangre viva son las lagrimas que lloro
pero es inutil por que ya la lloro tarde.

no hay tesoro mas valioso en este mundo
como la madre que nos dio el ser y la vida
que su cariño nos ofrece hasta que muere
se llora siempre cuando ya se ve perdida.

yo no cambiaba ni por mil puñados de oro
las bendiciones y el cariño de mi madre
de sangre vive son las lagrimas que lloro
pero es inutil por que ya la lloro tarde.