El son de la madrugada – Gilberto Santa Rosa

A, la, la, le, a, la, la, le, ala.

De madrugada, por esas calles
la triste soledad hoy me acompaña
mientras las horas, se van muriendo
en medio del recuerdo de tu amor.

Es difícil creer que haya podido
borrar del pensamiento, tu recuerdo
ya te he olvidado, y en ti no pienso
y no voy a esperar mas por tu regreso.

Tanto esperar y al final
igual que un truco de magia
desapareció el amor que me quedaba
ya te olvide.

(Tanto esperar y ya ves, te olvide, te olvide)
Aunque pensé que el amor iba a durar para siempre
el tiempo paso y el cariño borro
ya no te tengo en mi mente.

(Tanto esperar y ya ves)
Tanto esperar y tu ves que a la larga.
(Te olvide, te olvide)
Dicen que la distancia es el olvido
y ahora entiendo esa razón
sigue por tu camino que yo me quedo tranquilo
cantando mi son, de madrugada.

Tu me dejaste en la calle.
(De madrugada)
Cuando el sol se despertaba.
(De madrugada)
Mejor que siga caminando que de ese amor no queda nada.
(De madrugada)
El tiempo no pasa en vano y hasta el cariño se acaba.
(De madrugada)
Tu me dejaste en la calle cuando menos lo esperaba.
(De madrugada)
En ese momento que yo te adoraba me diste la espalda.
(De madrugada)
Mientras que tu cantabas y yo lloraba.
(De madrugada)
Como no tiene caso ya la puerta esta cerrada.
(De madrugada)
Para la niña, y pa’ la señora que brava.
(De madrugada)
Tu me dejaste en la calle cuando te necesitaba.
(De madrugada)
Óigalo, dilo Mario.

(De madrugada) (x12).